Un día a día
El día a día es el camino de toda persona a expensas de la valía individual, Sergio Garbey ayer, hoy y siempre tiene un ADN luchador.
La vida de Sergio Garbey Monier
Nada de lo logrado le ha sido fácil o producto de la fortuna, acompañado de la autoexigencia siempre ha dado lo mejor de sí mismo para tratar de construirse un destino.
Para acabar siendo médico, comenzó la residencia de su especialidad, llevándola con gran sacrificio. En ese tiempo sintió la aparición de las primeras manifestaciones de una realidad de naturaleza siempre condicionante: la Esclerosis Múltiple. Sin excusas y gran fuerza de voluntad logró concluir la especialización, pero con todo se acompañaba de una fuerte tensión y presión para cumplir con la responsabilidad contraída `venenos’ de lento impacto en el sistema nervioso, talón de Aquiles en esta realidad; en ese tiempo comenzaba un síntoma característico de esta patología: una cojera de su pierna derecha, apenas apreciable.
Con constancia y sacrificio logró concluir los estudios, en adelante cumplía con horarios de consultas, visitas a hogares y guardias médicas. Cuando todo parecía asentado, apareció la digragía (señal de agotamiento en las articulaciones), la cual se acentuaba por el exceso de trabajo y al serle necesario escribir en alta demanda: Acabo siendo separado de guardias y del trabajo de terreno. Sobrellevo todas estas circunstancias por casi 15 años, hasta la jubilación por edad y favorecida por la vulnerabilidad de ser paciente crónico ante la pandemia de Covid-19.
En la esfera más personal, Sergio ha sido padre de un hijo y una hija, el varón a la edad de 12 años falleció tras un accidente; la madre y su esposa se vio afectada de los nervios, lo que propicio que el peso del hogar recayera en Sergio: La difícil crianza de una adolescente de 13 años y la responsabilidad de una exigente profesión como la de médico, motivó que la enfermedad y los brotes de la misma se manifestaran. A lo que se sumo un divorcio que afrontar, después de 30 años de matrimonio. Su hija ya adulta e incluso ya trabajando decide quedarse con él (por aquel entonces ya estaba más afectado físicamente con la carga emocional añadida que supone un divorcio), pasado el tiempo ella se casa y de ello Sergio tiene dos nietos, niños que colman su vida de amor y felicidad.
En la actualidad no pierde la constancia y fuerza de voluntad por mantener la calidad de vida con el entrenamiento frente a la Esclerosis Múltiple. Sergio Garbey es Presidente de EM-CUBA desde 2013 hasta la actualidad, participando en eventos sobre EM tanto nacionales como internacionales y hoy en día a pesar de la limitación física al caminar, mantiene una vida activa y toda la actitud para luchar con fuerza y entereza por sus sueños.
